INFRAESTRUCTURAS

La construcción y mantenimiento, así como el uso de infraestructuras conlleva en ocasiones gran riesgo de incendio. Este riesgo aumenta proporcionalmente, en función del tamaño del proyecto. El agua nebulizada es viable para la protección de un gran número de ellas, independientemente del ámbito para el que fueron diseñadas.

En este apartado destacamos las protecciones de ENERGÍA: plantas térmicas, plantas solares, ciclos combinados, parques eólicos, generadores y turbinas, subestaciones eléctricas, transformadores, túneles de cables, etc. Además de las relacionadas con el TRANSPORTE: metro, tren, aeropuertos, helipuertos, hangares, puertos, terminales de carga, túneles, barcos, vehículos militares, etc.

La protección más demandada se encuentra en:

TÚNELES DE CARRETERA:
Facilitan las comunicaciones terrestres gracias a que salvan obstáculos físicos, reduciendo tiempos de tránsito. Sin embargo, por sus características de confinamiento, presentan riesgos mucho mayores y más peligrosos, especialmente ante incendios,  que en accidentes a cielo abierto.

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TRENES:
Ya sean de superficie o subterráneos, trenes y metros presentan los elementos de riesgo habituales, pero agravados por la reducida movilidad de un recinto confinado  y la dificultad de evacuación.

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TURBINAS:
Desde el punto de vista de la protección contra incendios, se trata de instalaciones de alta peligrosidad por su funcionamiento, gran carga de fuego y diversidad de instalaciones auxiliares. Por su alto coste y graves consecuencias económicas en caso de paros de producción, una adecuada toma de medidas de protección es de vital importancia.

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TÚNELES DE CABLES:
Cualquier afección sobre estos elementos puede devenir en cortes del servicio, incidencias, daños en otros equipos, paros de producción e interrupciones de todo tipo en las actividades económicas y productivas que dependan de ellos.

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PLANTAS DE GAS:
Las fases de producción incluyen: extracción, tratamiento, licuación, almacenamiento, regasificación, transporte y distribución hasta el consumidor final. En cualquiera de ellas, el riesgo de incendio o accidente es elevadísimo, ya que se trata de gases ligeros con un muy alto potencial inflamable y explosivo.

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Elementos críticos:


TRANSFORMADORES: Las pérdidas por daños no se cuantifican únicamente por el deterioro de equipos, sino que el paro en el suministro eléctrico puede afectar gravemente a empresas, industrias, servicios básicos como hospitales o zonas urbanas, con importantes repercusiones económicas. Leer más..