SISTEMAS DE PREACCIÓN

Los sistemas de preacción de agua nebulizada se instalan en zonas con materiales muy sensibles al agua donde una activación accidental no es deseable y podría tener consecuencias graves. Estas instalaciones utilizan difusores cerrados, montados sobre tubería seca, y además se combina con un sistema de detección de incendios.

 


Operación

Los equipos de preacción poseen dos líneas de activación y se deben disparar las dos para que se produzca la descarga. La primera línea es la instalación de difusores cerrados que están presurizados con aire o Nitrógeno, como sucede en las instalaciones de sistemas secos. La segunda línea de activación es la detección electrónica de incendios. Ambas líneas están conectadas a un sistema de detección de incendios que recibe las señales de activación de ambas líneas y es el encargado de gobernar la válvula de control que permite el paso del agua que se utiliza para realizar la extinción.

Para que se produzca una descarga es necesario que se disparen ambos sistemas, es decir, que se haya roto/abierto algún difusor debido al aumento de temperatura, provocando una caída de presión en la instalación de aire/nitrógeno que es detectada mediante un transductor de presión que está conectado con el sistema de detección de incendios, y que también la línea detección electrónica se haya activado.

 

Documentación 

APLICACIONES:

Con los equipos de preacción se busca reducir al mínimo los riesgos de cualquier accidente que pueda suceder en la instalación y, por ello, hasta que no se confirma el incendio no se produce la descarga.

 

Esta aplicación suele utilizarse en museos dónde una activación accidental puede afectar notablemente a las obras de arte que posea en su interior, o en una cámara frigorífica, en la cual una fuga en un difusor eche a perder todos los elementos que contengan la cámara.